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Las cinco facultades mentales


Dutiyavibhanga Sutta 

SN 48,10 {14S5.4.1.10,480}


Monjes, existen estas cinco facultades mentales. ¿Cuáles cinco? La facultad de la fe, la facultad del esfuerzo, la facultad de la atención consciente, la facultad de la concentración y la facultad de la sabiduría.

¿En qué consiste la facultad de la fe? Es el caso del discípulo de un noble que tiene fe en el Despertar del Tathagata de esta manera: el Bienaventurado es un arahant perfectamente despierto, perfecto en sus acciones y conocimiento, el Bienhechor y conocedor del mundo, el insuperable maestro de hombres que han de ser entrenados. Guía de los devas y seres humanos, el Buda. Ésta es, monjes, la facultad mental de la fe.

¿En qué consiste la facultad del esfuerzo? Es el caso del discípulo de un noble que genera el deseo de abandonar los perjudiciales estados mentales y adquirir los estados mentales saludables, es fuerte en esto, sólido en su esfuerzo y no elude su tarea concerniente al cultivo de los saludables estados mentales. Genera (i) el deseo de que no surjan malos y perjudiciales estados mentales; hace este esfuerzo, pone en ello su energía aplicando su mente y fortaleza. Genera (ii) el deseo de abandonar los malos y perjudiciales estados mentales que ya han surgido; hace este esfuerzo, pone en ello su energía aplicando su mente y fortaleza. Genera (iii) el deseo de que surjan los saludables estados mentales que aún no han surgido; hace este esfuerzo, pone en ello su energía aplicando su mente y fortaleza. Genera (iv) el deseo de que permanezcan los saludables estados mentales que ya han surgido, que los mismos no decaigan, se incrementen, se expandan, lleguen a su máximo desarrollo y plenitud; hace este esfuerzo, pone en ello su energía aplicando su mente y fortaleza. Ésta es, monjes, la facultad mental del esfuerzo.

¿En qué consiste la facultad de la atención consciente? Es el caso del discípulo de un noble que es atento, prudente, capaz de recordar y tener buena memoria. Él permanece contemplando (i) el cuerpo en sí mismo —con fervor, clara compresión y atención consciente—, abandonando todo deseo y aversión por el mundo. Permanece contemplando (ii) las sensaciones en sí mismas… (iii) la mente en sí misma… (iv) los fenómenos mentales en sí mismos —con fervor, clara compresión y atención consciente—, abandonando todo deseo y aversión por el mundo. Ésta es, monjes, la facultad mental de la atención consciente.

¿En qué consiste la facultad de la concentración? Es el caso del discípulo de un noble que alcanza la concentración que le permite dejar atrás su objeto, alcanza la unificación de la mente. Separado de la sensualidad, separado de los perjudiciales estados mentales, entra y permanece en (i) el primer jhana, acompañado de un pensamiento analítico dirigido y sostenido, lleno de arrobo y placer nacidos del aislamiento; de esta manera el esfuerzo no es en vano y las decisiones son fructíferas. Apaciguado el pensamiento analítico dirigido y sostenido, logra la calma mental y la unificación de la mente, entonces entra y permanece en (ii) el segundo jhana, lleno de arrobo y placer nacidos de la concentración; así posee la confianza y la unificación de la mente libre del pensamiento analítico sostenido y dirigido. Al extinguirse el arrobamiento, entonces permanece ecuánime, con atención consciente y clara comprensión, sensible a la sensación de placer; de esta manera entra y permanece en (iii) el tercer jhana, del cual los nobles declararon: feliz aquel que mora en la ecuanimidad y atención consciente. Al abandonar el placer y la pena —con la anterior desaparición de la alegría y la tristeza—, entra y permanece en (iv) el cuarto jhana, el cual va más allá del placer y de la pena, purificado con la ecuanimidad y la atención consciente. Ésta es, monjes, la facultad mental de la concentración.

¿En qué consiste la facultad de la sabiduría? Es el caso del discípulo de un noble que es sabio, que posee una sabiduría dirigida hacia el surgir y cesar de los fenómenos, una sabiduría noble, penetrante, que lleva correctamente al fin del sufrimiento. De este modo conoce tal como realmente es: este es el sufrimiento, este es el origen del sufrimiento, este es el cese del sufrimiento y este es el sendero que lleva al cese del sufrimiento. Ésta es, monjes, la facultad mental de la sabiduría.

Y en esto, monjes, consisten las cinco facultades mentales.